Sin embargo, Mark no se da por vencido; armado con su ingenio, sus habilidades y sus conocimientos sobre botánica, se enfrentará a obstáculos aparentemente insuperables.
Por suerte, el sentido del humor resultará ser su mayor fuente de fuerza. Obstinado en seguir con vida, incubará un plan absolutamente demencial para ponerse en contacto con la NASA.
Título: El marciano.
Título original: The Martian.
Autor: Andy Weir.
Saga/Trilogía: No.
Español: Sí.
Páginas: 416
Precio: AR$302,00
ISBN: 9788466655057
¡Hola a todos! Tengo el placer de estar una vez más con otra reseña en el blog, y en este caso se trata de El marciano.
Para ser sincera, no puedo quejarme en cuanto a mis lecturas de este año. Vengo de un motón de libros de 5/5 o casi, ¡me pone muy contenta! El marciano no fue la excepción.
Esta historia de ciencia ficción nos presenta un futuro no muy lejano en el la raza humana ha conseguido llegar a Marte. Nuestro protagonista, Mark Watney, es un astronauta perteneciente a la misión Ares 3, junto con otros cinco compañeros.Para resumir, una tormenta de arena obligó a la tripulación del Ares 3 a evacuar. En el proceso, una de las antenas que componían al Hab se rompe y se le clava a Mark en el costado. Todos sus signos vitales bajan, por lo que su tripulación lo da por muerto y logra huir por los pelos. Pero vamos, no es que no intentasen recatarlo, es que las condiciones los obligaron a tener que dejarlo ahí.
La cosa es que, casi por un milagro, Mark no muere. Él, como personaje, es uno de los puntos más fuertes del libro. Es sumamente inteligente y sobre todo, chistoso. Llegué a quererlo muchísimo. Sufrí con él, me reí con él, sentí miedo con él. Se me hizo muy humano, creo que Weir construyó su persona del tal forma que se siente muy cercano al lector.
Pero bueno, volviendo a la historia, Mark es ingeniero y botánico, cosa que le servirá bastante para sobrevivir en Marte ya que hay un problema: el Hab, la base que la tripulación tenía en el planeta, no tiene las suficientes provisiones como para abastecerlo por cuatro años, hasta que llegue el Ares 4 en su rescate. Así, haciendo uso de sus conocimientos y su ingenio, Watney tendrá que intentar sobrevivir en este planeta inhóspito, probando, entre otras cosas, plantar una granja de patatas en un planeta en el que no crece nada.
Wow. Eso es lo primero que les puedo decir en cuanto a mi opinión. Este libro sí que me sorprendió. Esperaba encontrarme con un relato que solo se enfocase en el intento por sobrevivir del protagonista como único personaje, y que si aparecían otros eran simplemente en la memoria del superviviente, ¡pero no es así! Me llamó muchísimo la atención como Andy Weir se las ingenia para contar la historia, encontrándonos siempre con puntos de vista nuevos. Tenemos desde las entradas del diario de Mark, hasta lo que está pasando en su tripulación, como nos cuentan lo que se vive en la NASA, y mucho otros más, en serio, muchos.
La forma en la que el autor construye a sus personajes me pareció muy buena. Al final del libro, prácticamente me había encariñado con todos. Con unos simples gestos o con pocas palabras logra otorgarles personalidades muy bien definidas y diferentes entre sí. Y un dato curioso, casi no los describe físicamente. Por ejemplo, yo a Mark me lo imaginé como a Matt Damon porque en mi edición del libro su cara está la portada (lo sé, la naranja es una preciosura pero no tuve la fortuna de conseguirla), aunque en realidad no tenemos ninguna descripción concreta del personaje principal. Ahí ya se pueden imaginar por dónde va la cosa.
Algo que destaco muchísimo de Andy Weir es el esfuerzo que seguramente le ha costado escribir esta novela. Hay tanta investigación en esas páginas, tanto lenguaje científico y términos técnicos. No les mentiré, al principio me costó habituarme y es verdad que había párrafos en los que no me enteraba de nada de lo que me estaban contando, pero a pesar de todo me animé a continuar con la historia porque no se me hizo un impedimento. Sin duda es un tipo de ciencia ficción diferente del que últimamente estamos acostumbrados, ya que a cada innovación científica nos otorga respuestas científicas a preguntas tales como "¿Cómo es eso posible?".
¿Punto fuerte del libro? El humor. Ya les digo, adoré a Mark y gran parte del porqué lo hice es por el increíble sentido del humor que posee, aún en los peores momentos lo conservó. Hacía mucho tiempo que un libro no me sacaba tantas carcajadas.
"[12.04] JPL: [...] Otra cosa: controla tu lenguaje. Todo lo que escribes se transmite en directo a todo el mundo.
[12.15] WATNEY: ¡Mira! ¡Un par de tetas! -> (.Y.)"
El ritmo de escritura es muy bueno y no decae en ningún momento. Es ágil. La verdad es que sí tardé bastante en leerlo, pero sólo porque cada vez que lo agarraba tenía que estar muy concentrada para entender todo, o la mayoría, de lo que el libro me estaba explicando. Ya les dije, hay muuuucho lenguaje técnico. Eso es por lo que quizás la lectura se puede hacer un poco densa, pero les aseguro que hasta alguien que no tiene ni idea de ciencia como yo puede disfrutarla.
Al final me estaba mordiendo las uñas por saber como la situación se iba a desenlazar, ¡por Dios, cuanta tensión! A ese punto el libro toma un rimo frenético y les aseguró que no podrán separarse de sus paginas hasta saber cómo concluye.
Para resumir, tenemos una historia muy buena que trata temas como la fortaleza de un hombre, la amistad, la soledad, y el sentido de auto-preservación que la raza humana posee; como al final del día, luego de tantos asesinatos, conflictos y guerras, siempre buscamos ayudarnos los unos a los otros. La reflexión que plantea sobre esto me gustó un montón.
Mi puntuación es de 4,5/5 lunas. Ultra recomendado. Me despido por ahora, me voy a ver la película de este genial libro. Ya les contaré que me pareció, ¡adiós!
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